La fotosíntesis es el proceso natural que permite a las plantas transformar la energía del sol en alimento. Gracias a este mecanismo, las especies vegetales obtienen la energía necesaria para crecer y desarrollarse, mientras generan oxígeno como subproducto necesario para la mayoría de la vida animal en el planeta.

El proceso de la fotosíntesis
La fotosíntesis ocurre en las hojas y otras partes verdes de las plantas, en estructuras microscópicas llamadas cloroplastos. Estos contienen clorofila, un pigmento que al absorber la luz solar le da a las hojas su color característico. El proceso se divide en dos fases principales:
Fase luminosa
Como su nombre indica, esta etapa necesita luz solar para ocurrir. Durante este proceso la planta absorbe la luz y la convierte en energía química. Se descompone el agua (H₂O), liberando oxígeno (O₂) a la atmósfera. Se generan moléculas de ATP y NADPH, que almacenarán energía para la siguiente fase.

Fase oscura (Ciclo de Calvin)
A pesar de su nombre, no requiere oscuridad, sino que puede suceder tanto de día como de noche. En esta fase la planta captura dióxido de carbono (CO₂) del aire y usa la energía almacenada en el ATP y NADPH para transformar el CO₂ en glucosa, un tipo de azúcar que servirá como alimento.

La fotosíntesis nutre al planeta
El balance ecológico en la Tierra depende enormemente de la vida vegetal, tanto por su lugar en la cadena alimenticia como soporte de miles de especies como por la producción del vital oxígeno, que simultáneamente absorbe CO₂ y ayuda a regular el clima.

En entornos urbanos, la necesidad de espacios verdes se vuelve mucho más dramática, puesto que con el desarrollo de infraestructura sin correcta gestión de áreas suceden diversos fenómenos como el de “isla de calor” que eleva la temperatura ambiental e impacta negativamente en la calidad de vida.
La fotosíntesis no solo ocurre en los grandes bosques, sino en cada árbol y planta que vemos a diario, contribuyendo al equilibrio ecológico incluso en medio de la ciudad, así que la próxima vez que visites el parque, recuerda que las hojas verdes que te rodean están trabajando silenciosamente, convirtiendo la luz solar en vida.
