Parece ser que el origen tanto de San Valentín como de la celebración en torno a él es tan misterioso como lo mismo que se festeja: el amor. Y es que existen varias historias que cuentan quién fue este santo y por qué lo relacionamos con este sentimiento enigmático que nos ocupa toda la vida. Por ello, sin mayor preámbulo, nos hemos dado a la tarea de contarte brevemente de dónde viene esta efeméride y, más adelante, por qué el chocolate es el coprotagonista del día.
Un primer dato muy curioso es que la misma iglesia católica no ha terminado de ponerse de acuerdo sobre la veracidad del afamado San Valentín, ya que en 1969 ¡eliminó del calendario eclesiástico la festividad de este santo! Así como lo lees, si buscas esta fecha, encontrarás la conmemoración de muchos santos, pero no San Valentín. Sin embargo, la tradición popular (y no olvidemos la mercadotecnia) ha decidido conservar los festejos a pesar de los deseos de la iglesia.
¿Quién fue San Valentín y qué hizo por el amor?
Lugar: Roma
Fecha: siglo III d.C.
En aquella época en Roma, reinaba el emperador Claudio II, a quien apodaban “el gótico” debido a sus contundentes victorias sobre el ejército de los godos. Como buen y esforzado hombre de armas, el césar llegó a convencerse de que los jóvenes soldados debían ser solteros para siempre estar prestos a la guerra sin tener el deseo de regresar con una esposa e hijos, por lo que impuso una ley que prohibía el matrimonio de estos varones. Sin embargo, como bien sabemos, el amor siempre triunfa y, a pesar de esta prohibición, hubo un sacerdote reacio que decidió seguir casando a escondidas a las jóvenes parejas bajo la liturgia católica: Valentín. Cuando el emperador se enteró de la afrenta del sacerdote, ordenó a la élite romana capturarlo, para luego ser torturado y, finalmente, decapitado un día 14 de febrero del año 270, lo que le convirtió en el santo patrono de los enamorados.
¿Y esto qué tiene que ver con el chocolate?
Lugar: Nueva España
Fecha: 1521
Pues bien, el matrimonio del Día de San Valentín (o Día del Amor y la Amistad) con el chocolate tuvo que esperar unos años más para tener lugar, ya que no fue sino hasta la época de la Conquista cuando los españoles descubrieron el cacao y sus numerosos beneficios para el cuerpo y la mente.
Fue del conocimiento de Hernán Cortés y compañía que tomar la bebida de cacao les daba a los hombres una gran energía y virilidad, por lo que en los pueblos mayas era común beberlo en las celebraciones de bodas. Además, cuenta la leyenda que el mismo Moctezuma tomaba alrededor de 50 copas de este elixir al día para satisfacer a sus múltiples esposas.
Este curioso rumor le fue llevado por los conquistadores al rey español Carlos I y pues… el resto es historia.
Por ello, ya sea para celebrar el amor o la amistad, ¡el chocolate no puede faltar!