Por si alguna vez te lo preguntaste, un hábitat es básicamente el lugar donde viven los seres vivos, como un bosque, un lago o hasta un desierto. En este espacio, se encuentran todas las condiciones necesarias para que las plantas y animales puedan m[as que sobrevivir: hay alimento, agua, aire y refugio.
Es un espacio muy particular, capaz de generar las condiciones específicas para que se desarrolle y reproduzca una especie, puede darse dentro de un lugar inhóspito, imagina un rincón sombreado en un desierto, con elementos muy específicos: agua, sombra, plantas, y estos permiten que viva una determinada especie animal, y prospere. Son esos rasgos únicos los que generan un hábitat, si estos llegaran a cambiar se comprometería la vida.
Cuando hablamos de ecosistemas, la cosa se vuelve un poco más amplia. Se trata de un conjunto que incluye a todos los seres vivos, al entorno en el que se desarrollan y las interacciones entre ellos. Por ejemplo, un ecosistema puede ser tan pequeño como un helecho (y todo lo que ocurre en él) en una selva o tan grande como la misma selva. Cada uno tiene sus propias características y relaciones.
Así que, resumiendo, mientras que el ecosistema abarca un panorama más amplio que incluye tanto a los seres vivos como a su entorno, el hábitat es ese rincón específico donde todo se conecta y sucede. ¡Mundos fascinantes, sin duda!
Para recordarnos la importancia que tienen estos lugares, la ONU estableció que el primer lunes de octubre se celebre el Día Mundial del Hábitat. ¡Es una buena oportunidad para reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza!
Fuentes:
-https://losenlacesdelavida.fundaciondescubre.es/que-es-la-biodiversidad/preguntas/cual-es-la-diferencia-entre-habitat-y-ecosistema/#:~:text=En%20definitiva%2C%20mientras%20que%20el,interacciones%20entre%20los%20seres%20vivos.
-https://www.gob.mx/conanp/es/articulos/compartiendo-habitat?idiom=es